Hola de nuevo amigos seguidores de mi blog, y los que os acercáis por primera vez bienvenidos, espero que os gusten mis entradas y que os sirvan de orientación por si alguna vez queréis repetir mis excursiones.
Esta vez me he acercado a un lugar muy conocido del Pirineo Aragonés y a otro no tanto. Estoy en la Comarca del Alto Gállego, en pleno Valle de Tena. Ahora os cuento.
Hoy es 21 de julio de 2020, seguimos con el covid-19 amargándonos la existencia pero es lo que hay. Tomando las precauciones necesarias y haciendo caso de lo que nos dicen las autoridades sanitarias todo debería ir bien.
Como siempre que salgo, madrugar es indispensable para aprovechar el día. Además llegas a destino sin apenas gente, lo cual si vas buscando tranquilidad es una delicia, y también, por qué no decirlo, evito cruzarme con demasiadas personas que, dada la situación, a saber si son portadores del coronavirus sin ellas saberlo, son los llamados asintomáticos.Evitemos en lo posible los contagios.
Para llegar a esta zona en coche desde Zaragoza, hay que tomar la autovía Mudéjar A-23 y tras pasar Sabiñánigo, tomar el desvío a Biescas N-260A,al llegar al pantano de Búbal A-136, desviarse a la izquierda hasta Piedrafita de Jaca y seguir la carretera hasta el aparcamiento de Lacuniacha.
Pista desde el Parque Faunístico Lacuniacha
Llego temprano al aparcamiento del Parque «Lacuniacha» a 1.380 m de altitud. No hay prácticamente nadie. Una persona va en bicicleta de montaña. Le pregunto si sabe hacia donde se tiene que dirigir uno para acceder al Arco Geotectónico y me contesta :¿y eso qué es?. Pienso, perfecto, cuanto menos gente lo conozca mejor, más tranquilo estaré allí con el tema del coronavirus.
Dejo el coche aparcado, con todo el espacio para mí y comienzo a caminar por la pista que conduce hasta el Ibón de Piedrafita (1.600 m.). Voy solo, a estas horas es normal. Nada más empezar me encuentro con la típica barrera que impide cruzar a vehículos no autorizados.
Pronto, junto a una valla para el ganado, a la derecha, hay un poste con indicaciones del PR-HU 93.1 que nos permitirá ir a Piedrafita de Jaca, al bosque de El Betato, al Ibón de Piedrafita y al Arco Geotectónico. De todas formas, hoy voy a ir por la pista algunos tramos, y otros iré acortando por atajos hasta llegar al ibón.
Lo que hago es estar atento y en cuanto veo alguna senda que corta la pista, me meto por ahí, es una manera de ahorrar tiempo,y así no hay que recorrer las amplias curvas que dibuja la pista.
Cuando la senda sale otra vez a la pista, tal vez la cruce sin más y continúe por el campo o sea necesario recorrerla unos metros hasta volver a tomar el atajo. De todas formas hay carteles indicativos de sobras tal y como os pongo en las fotos.
El Barranco del Boj por el PR-HU 93.1
Tras 900 m por la pista veremos un poste indicativo a nuestra izquierda, con una pequeña cabaña a nuestra derecha. La cabaña es el refugio de Telera o Las Planas. El cartel nos indica que por la izquierda se llega al Arco Geotectónico de Piedrafita a 3,2 km y al Ibón de Piedrafita a 0,8 km. Hay que ir por ahí. Seguiremos el PR-HU 93.1 (pequeño recorrido).
Comenzamos a ascender por un sendero que discurre junto al bonito Barranco del Boj. Este tramo transcurre junto a un pequeño arroyo con pequeños saltos de agua, hermosos pinos a los lados y al fondo Peña Telera, ofreciendo una estampa espectacular.
Este lugar es muy bonito así que me hago alguna foto junto al torrente de aguas puras y cristalinas y con Peña Telera y Peña Parda como telón de fondo.
Al dejar el barranco del Boj, salgo a una pradera en la que hay una gran piedra. Es el barranco Cuasta, que se recorre enseguida. Justo enfrente mío está la muralla de roca a cuyos pies está el Ibón de Piedrafita.
Se pueden ver los siguientes picos, de izquierda a derecha, Peña Blanca Alta (2.512 m), la Corona del Mallo(2.535 m), Peña O Campanal (2.392m), el corte con forma de U es el Canal de Covachirizas, el siguiente es la Peña Parda (2.661 m), y finalmente, el más alto de todos, a la derecha, es Peña Telera (2.762 m).
Continúo mi camino hacia el Ibón de Piedrafita siguiendo las marcas blancas y amarillas de la PR-HU 93.1. De todas formas como podéis ver, los carteles abundan. No hay pérdida..
El Ibón de Piedrafita (1.600 m)
Ya enseguida llego al Ibón de Piedrafita. Es un lago de origen glaciar (ibón en aragonés) muy vistoso, a un tiro de piedra de los pueblos del valle, lo que no hace necesario alcanzar altas cumbres para disfrutar de algo así. Es un lugar al alcance de todos, familias incluídas, y realmente sorprendente.
Cuando llego allí me encuentro con un gran rebaño de ovejas, que vienen de los pastos de la zona y que se acercan al ibón a beber agua. Un pastor y su perro las vigila. El ibón, que ya conocía de otras excursiones, tiene hoy algo menos de agua que en otras ocasiones.
Hago un breve parada para sacarme alguna foto, y continúo la marcha, pues mi objetivo es el Arco Geotectónico de Piedrafita.
Las praderas de Calatuero
Continúo por la pista que rodea el ibón por la izquierda, con la Peña Blanca Alta, la Corona del Mallo y el O Campanal justo enfrente, hacia las praderas del Calatuero.
Si os fijáis en la foto que pongo debajo, a parte de las marcas del PR-HU 93.1, blancas y amarillas, también tenéis unas marcas azules y rosas sobre una roca, que corresponden con una ruta de esquí de fondo, la de la marcha nórdica.
La pista de gravilla que hemos tomado desaparece y se convierte en senda que cruza los prados. Podemos ver algunos pilotes con las marcas del PR y del circuito de marcha nórdica. No hay más que seguirlos. Incluso están pintados juntos los indicativos de ambas rutas sobre algunas rocas. No nos podemos despistar, las señales son abundantes y muy precisas.
La senda va progresivamente subiendo por la ladera de la montaña, por la zona del Calatuero.
Continúo caminando y entro en una zona de canchales.Rodeo por la parte superior lo que parece ser una antigua dolina. Mirando hacia atrás a un lado, veo abajo, en la zona de La Hoya, una especie de refugio o construcción ganadera.
Al frente veo los picos en forma de sierra, que componen parte de la Sierra de la Partacua, Peña Blanca (2.314 m), Punta Cochaldo (2.213 m), Forqueta D´os Palomos (2.109 m) y Forqueta D´os Güertos (2.069 m).
El bosquecillo del Sarronal
Una vez que he pasado esta zona de piedras, la glera queda atrás y entro en un bosquecillo de pinos hacia la zona del Sarronal. Sigo viendo los carteles indicativos de la ruta de marcha nórdica con marcas azules rosas así como los del PR-HU 93.1 blancas y amarillas.
Esta zona es muy agradable puesto que podemos refrescarnos a la sombra de cualquiera de los abundantes árboles y además con el aliciente de estar rodeados de prados.
Al salir del bosque accedemos a una depresión del terreno, con aspecto de pequeño valle, seguimos en la zona del Sarronal, por el que asciende la senda que va directa hacia la Sierra de la Partacua.
La senda después alcanza una planicie herbosa donde encontramos un poste con distintas indicaciones, una de ellas nos dice como llegar al arco. Tan solo está a 0.6 km. Pero todo de subida. Pero ¿dónde está el famoso arco?. Pues si nos fijamos bien, en la foto que pongo debajo, se ve.
Con el zoom os ayudo. Aquí se ve el arco, bajo Peña Blanca y el pico El Campanal, en todo su esplendor aunque hay que reconocer que se puede confundir de lejos con algún árbol ya que tiene el bosque muy cerca.
Mientras subo me encuentro con una Zygaena trifolii, una mariposa muy vistosa que se encuentra en praderas, y que suele volar en junio, julio y agosto desde la zona baja hasta unos 2.000 metros de altitud. La que logro fotografiar, la capto justamente cuando enrolla su lengua.
La senda de subida al Arco Geotectónico
Esta es quizás la parte más dura del recorrido, aunque para los que estamos acostumbrados a caminar por la montaña no supone dificultad alguna. La senda enseguida nos exige caminar por una una pronunciada pendiente ya que va prácticamente recta, no zigzaguea apenas.
Además se da la circunstancia de que el firme es algo inestable, se pasa por algunos canchales de piedra menuda y tenemos que caminar por zonas en las que hay abundantes piedrecillas sueltas. Esto sumado a que vamos subiendo, hacen algunos tramos algo incómodos, ya que al pisar a veces se resbala, por eso aconsejo llevar bastones que son de gran ayuda y calzado adecuado de suela que se agarre bien. No se os ocurra subir con deportivas.
En algún pequeño tramo cruzamos una zona de árboles, aquí el firme es diferente, piedra más grande y tierra, y además se agradece la sombra, pero pronto volvemos al camino más inestable.
Poco a poco vamos subiendo y alcanzando más altura.En la foto que os pongo a continuación, mirando a mi derecha desde el camino, se aprecia una pradera en la zona de abajo, desde ahí vengo, así podéis haceros una idea del desnivel que se va superando.
Y en esta otra veis que la senda a veces pasa por zonas con rocas a la izquierda y pinos a la derecha, pero siempre subiendo por la ladera del monte.
Otras veces es la propia roca es la que hace de camino. De todas formas la subida, como os digo, no es complicada para una forma física normal y es apta para todas las edades. Cada uno sube a su ritmo y ya está.
También me fijo en las hierbas y plantas que me voy encontrando.Algunas no las había visto nunca, como una parecida a un de trébol de cinco hojas sobre las que hay como una especie de pequeños estambres circulares.
Como podéis ver, a ratos el firme sigue presentando piedrecillas sueltas, por eso os aconsejo llevar un buen calzado para evitar resbalones inoportunos. Se alternan zonas despejadas con zonas entre los pinos.
El Arco Natural Geotectónico (1.860 m)
Caminando entre los pinos y de golpe, a tu izquierda, un poco más arriba, aparece el arco. Aunque se hayan visto fotos antes, no deja de sorprender este caprichoso monumento de la naturaleza cuando lo ves por primera vez in situ. Es realmente original y único.
La senda continúa subiendo, y va dejando el arco a la izquierda, pero tranquilos, luego hace un giro brusco también a la izquierda y lo rodea, permitiéndonos llegar hasta allí. No intentéis ir directos para pasar por debajo del arco desde aquí porque el camino se hace impracticable. Seguid la senda.
Voy solo, no hay nadie. Bueno , nadie no, hay un habitante habitual. Un buitre está posado en la zona alta del arco, buena atalaya para otear y descansar de sus vuelos. Ya se ha dado cuenta de mi presencia, pero como estoy todavía lejos, no se mueve.
Antes de que se asuste y se vaya, logro hacerle una foto con el zoom. En cuanto me aproximo un poco más, emprende el vuelo.
Poco a poco voy subiendo y como podéis ver la senda va por la ladera de la montaña rodeando el arco, que ahora queda en sombra.
Finalmente llego a mi objetivo. Despliego el trípode, bajo con cuidado unos metros por la ladera de hierba, y me hago una foto de recuerdo. El día está algo brumoso y el horizonte no se ve tan claro como me gustaría,pero aún así, las vistas son espectaculares.
Pero ¿cómo se puede haer creado de forma natural algo así? Pues parece ser que todo se debe a la erosión de las calizas. Este tipo de formas responde a veces a una evolución muy antigua,probablemente relacionada con un antiguo conducto kárstico subterráneo,que,por erosión, se localiza ahora en superficie.
Después me doy cuenta que al arco se puede subir, pues hay una pequeña senda por su pared. Si vais con cuidado, podréis llegar hasta el nivel donde vi antes el buitre posado y disfrutar de las vistas del valle. Pienso si podré hacerme una foto ahí, pero el automático de a cámara sólo tiene 12 segundos y únicamente da de sí para pillarme a mitad de camino. Bueno, menos es nada.
Una vez arriba, es momento para descansar, comer algo y disfrutar del paisaje. Pero mi tranquilidad durará poco. Oigo voces.
Al poco aparece gente. Todos sin mascarilla. Es normal, nadie sube hasta aquí con ella puesta, resultaría axfisiante. Pues nada, si me cruzo con alguno guardaré una buena distancia de seguridad. De todas formas esto del coronavirus es estresante, pero qué le vamos a hacer. Es lo que hay.
Debajo os pongo una foto que hice desde la parte de arriba del arco. Se ve al frente el macizo de Viñamala, o Vignemale, como lo llaman los franceses. El embalse que se ve es Búbal y el pueblo es Piedrafita de Jaca. La pradera es la zona de La Hoya, y si os fijáis, a la izquierda abajo, se ve la construcción ganadera o refugio.
En esta otra se ve el pantano en toda su extensión y al fondo, entre la bruma la Sierra de Tedeñera, con el pico más alto, Peña Blanca (2.556 m), a su izquierda el pico Mandilar (2.211 m) y a su derecha el pico Peña de la Fajalata (2.147 m).En la parte baja, a la derecha, se ve la pradera desde donde he iniciado la subida hacia el arco.
Los buitres siguen revoloteando por la zona, majestuosos, aprovechando las corrientes de aire.
Regreso al Ibón de Piedrafita
Bueno, pues tras disfrutar un rato del entorno, decido que toca volver.Ahora hay que desandar lo andado.
Bajando, veo parte de la Sierra de la Partacua en todo su esplendor,desde luego hace honor a su nombre, el conjunto de los picos parecen el filo de una sierra.
Paso la zona de piedra suelta y llego a la zona más herbosa y al poste que me indica la dirección de vuelta al Ibón de Piedrafita.
Cruzo el bosquecillo y llego a la zona de rocas. Puedo ver la Hoya y el refugio o construcción ganadera claramente más abajo.
Ya estoy llegando al ibón. Voy por las praderas, con el telón de fondo de Peña Telera a mi izquierda, siempre imponente y majestuosa.
Peña Blanca se yergue enfrente, al otro lado del Pantano de Búbal y con el zoom parece una mole surgiendo de la pradera.
Ya en el ibón ahora tengo que seguir bajando por el Barranco del Boj y llegar hasta el coche. Veo gente bañándose,ahora ya se nota el calor.
Ya en el barranco veo que viene bastante gente. Y lo hace por la senda que he utilizado a la ida. Para evitar tener que cruzarme con ellos, vuelvo por un camino que veo a la derecha del arroyo. Por esta senda voy solo. También me doy cuenta que este lugar tiene merecido el nombre de Barranco del Boj, pues abundan estos arbustos.
Hasta Lacuniacha por la senda
Al salir del barranco, voy un tramo por la pista, pero luego sigo unas indicaciones que veo a un lado de la pista y que me permiten acortar por varios atajos y no tengo que recorrerla en su totalidad.Es un camino que no he utilizado esta mañana pero que me llevará igualmente hasta Lacuniacha mucho antes.
Por aquí aparecen vacas por todas partes, es zona de pastos, continúo hacia Lacuniacha.
Finalmente la senda sale a la pista donde he dejado aparcado el coche por la mañana. Sorprendentemente, el aparcamiento ahora está a rebosar.Era de esperar. Doy por concluida la excursión y el objetivo de ver el arco, cumplido.Ha sido una buena mañana en un entorno precioso del pirineo aragonés. Gracias por leer mi entrada, espero que os hay gustado.¡Hasta la próxima!
"Momentum". Relatos de un senderista. 